Trabajar con alegría.

 

Cuando los jóvenes farfullaban panizo (cuando limpiaban las mazorcas de maíz), al que le salía una mazorca con un grano negro le daban pellizcos, y al que le salía salía un grano colorado, le daban abrazos. Parece ser que los pellizcos no eran moco de pavo, y los abrazos, bien castos.

[Yeste, 1feb06, sr. Donato, 72 años]