Ando tan liado desde que volvimos de las vacaciones de primavera que no he podido ponerme con la Hoja volandera Boletín de abril hasta ahora, pero ya sabéis: más vale tarde que nunca. Vamos al lío.
DESTACADO. Ya sabéis que el pasado mes me enredé con un proyecto peculiar: Un loro contra el cáncer. Parece que ha despertado el interés de Javier Pizarro, periodista de El Asombrario, revista cultural de Público.es, que me ha hecho esta completa entrevista hablando de libros y loros.
DOS REVISTAS ESCOLARES. El pasado mes se publicó una entrevista que me hicieron para Las peras del olmo, la revista escolar del Colegio Público Trabenco, en Leganés: aquí la tenéis, espero que os resulte de interés. Unos días después en la revista Escuela Abierta, del CRA de Sta. Lucía, en la provincia de Guadalajara, se publicó un breve artículo mío sobre animación a la lectura: también lo tenéis aquí completo.
UN LORO CONTRA EL CÁNCER. En el mes de marzo donamos los primeros dos mil euros a la Asociación Española Contra el Cancer, os recuerdo que podéis seguir las cuentas con todo detalle aquí. Por si no sabéis de qué va este de Un loro contra el cáncer, aquí lo explico.
CURSOS. Os anticipo que en mayo volveré a impartir el curso online en la escuela de AnaTarambana: ¡Qué bello es escribir! (propuestas de escritura a partir de libro álbum) y, además, también impartiré una segunda parte con nuevas propuestas. En la próxima hoja volandera os daré cumplida información de todo esto.
AGENDA. La agenda de abril es una locura, cuento por diez provincias: Cuenca, Granada, Cáceres, Guadalajara, Toledo, León, Alicante, Madrid, Albacete, Navarra y Ciudad Real, y además estaré unos días en Estrasburgo contando en el IX Festival de Cuentos para Adultos que organiza la Casa Latinoamericana. Tenéis toda la agenda en la web, echad un vistazo, quizás esté cerca y os apetece que os cuente.
CUENTOS. Aquí van los cuentitos elegidos de entre los que publiqué en marzo en mi cuenta en tuíter:
"Cada mañana su cuerpo olía a pan recién hecho. Ella decía que pasaba la noche amasando sueños. Él sólo pensaba en comérsela a besos."
"Las albóndigas estaban deliciosas, aun así el niño no dejó de preguntar por el abuelo. Nosotros, callados, comíamos sin mirar al plato."
"Se había enamorado de la sombra de esa mujer al atardecer enredándose entre los olivares. El resto del tiempo convivía resignado."
Feliz mes de cuento
Pep Bruno
